Neymar anhela con urgencia regresar a las canchas de manera oficial. El delantero de la Selección de Brasil, con pasado reciente en el PSG, desea volver a pisar el verde césped y jugar la próxima Copa América representando a su país. Rodeado de talento con sus pies, y de logros colectivos y personales, Ney es uno de los jugadores más codiciados a nivel mundial. Sin embargo, desde su llegada a Arabia Saudita no pudo desplegar su buen juego. Como si fuera poco, fue cuestionado por su estado físico.

En octubre de 2023 fue el centro de una noticia grave que lo marginó de las canchas. En un partido entre Uruguay y Brasil, por las eliminatorias de cara al próximo mundial de fútbol, tuvo un fuerte cruce con Nicolás de la Cruz y tras haber pisado mal su rodilla izquierda fue la más damnificada. El grado de su lesión indicó una ruptura de ligamento cruzado anterior y menisco. Tal es así que el actual jugador del Al Hilal fue retirado en camilla y, desde entonces, no volvió a jguar de manera oficial.

Su regreso es deseado por las autoridades del club árabe, por sus compañeros de equipo, y también por los de la Selección de Brasil, y, fundamentalmente, por los patrocinadores que invirtieron dinero desde la llegada de Neymar a la liga de Arabia Saudita. No solo tuvo que padecer la lesión, sino también fue el ojo de la tormenta en varias oportunidades: con la separación de Bruna Biancardi; una fiesta escandalosa en un barco; y, el rumor sobre su posible próxima paternidad extramatrimonial.

Dentro de lo que se conoce públicamente, la evolución de su lesión es favorable. Empezó a tener contacto con la pelota y eso indica que su regreso a las canchas está cada vez más cerca. Pero los dedos acusadores pasaron a estar nuevamente sobre él, sobre todo por un cuestionamiento sobre su estado físico y un peso que, probablemente, esté por encima de los pliegos acordados y aceptados por el departamento de nutrición del club árabe.