Antes de hacer realidad su sueño de pelear contra Mike Tyson, Jake Paul deberá superar al campeón de BKFC y maestro del nocaut, Mike Perry. Este enfrentamiento se llevará a cabo este fin de semana, el 20 de julio, en Tampa, Florida.

Por un lado, "The Platinum" Perry tiene garantizada una suma de un millón de dólares por reemplazar al boxeador miembro del Salón de la Fama, quien se retiró debido a un brote de úlcera. Por su parte, "The Problem Child" está acumulando el pago más grande entre los dos peleadores, con una bolsa garantizada de 3 millones de dólares, sin mencionar las enormes ganancias esperadas de las ventas de PPV.

Se estima que Jake Paul obtendrá una suma total de 8 millones de dólares, gracias a un recorte del 60% del PPV. En cuanto a Perry, su participación del 40% le asegurará ganancias totales de 3 millones de dólares.

Esta pelea marca el regreso de Mike Perry al boxeo profesional por primera vez desde 2015, después de una derrota ante Kenneth McNeil. Para Paul, este será otro día en la oficina, ya que el joven YouTuber convertido en boxeador obtuvo su última victoria en marzo.

Mike Perry piensa en su próxima pelea

Desde que dejó la UFC, Mike Perry se ha convertido en la estrella principal de BKFC, ganando más dinero del que solía ganar en la promoción de MMA. Además, la próxima pelea contra Paul no solo le hará ganar una fortuna, sino que Perry apunta más allá de Paul, con la esperanza de enfrentar al legendario "Iron" Mike Tyson.

"Iba a decir, ya sabes, este acuerdo de Netflix con Mike Tyson, quiero decir, siento que noqueo a Jake y dirán, 'Oye, ¿quieres pelear con Mike en su lugar?'", comentó Mike Perry.

Confiado en que descarrilará el tren de la propaganda sobre Jake Paul, Perry afirmó que sería un mejor rival para Tyson y que podría soportar los golpes violentos del ex peso pesado. Este combate promete ser un espectáculo emocionante y una prueba significativa para ambos luchadores mientras buscan avanzar en sus respectivas carreras en el mundo del boxeo profesional.